lunes, 29 de enero de 2007

¿QUIÉN TIENE RAZÓN?


El ambiente en la ciudad de Alcorcón en estos últimos días se ha ido enrareciendo poco a poco. La convivencia pacífica que parecía reinar en esta localidad no era más que una quimera como se ha podido apreciar por el rumbo que han tomado los acontecimientos. Los sucesos se han ido produciendo y la policía ha tomado las calles de una forma permanente que a muchos les ha asombrado.
Sin duda en Alcorcón los enfrentamientos entre grupos, tribus o bandas urbanas se habían convertido en habituales desde hace ya algún tiempo sin que nadie se haya querido dar cuenta. El alcalde asegura que no tenía constancia de la aparición de bandas latinas y sobre todo de que éstas cobrasen a los ciudadanos por jugar en las canchas de baloncesto. Según palabras del alcalde, "no hemos recibido ninguna queja o denuncia por parte de los ciudadanos sobre la existencia de bandas". La delegada del Gobierno también ha asegurado la inexistencia de bandas latinas.
Este hecho contrasta, con un informe realizado hace dos años y en el que se ponía de manifiesto la existencia de grupos de distintas ideologías y nacionalidades. Parece que estos datos se ajustan a la situación actual del municipio, ya que según los jóvenes hay contabilizadas más de una docena de grupos o tribus urbanas en Alcorcón.
Finalmente, todas estas suposiciones se han hecho realidad y el pasado domingo vivimos unos altercados que nada tienen que ver con el modelo de ciudad tranquila y pacífica. Unos dicen que los latinos se estaban pasando de la raya y había que pararlos, otros que la convivencia es normal.... Entonces, ¿quién lleva la razón? Muchos vecinos de Alcorcón aseguran que los medios de comunicación tienen la culpa de la situación del muncipio ya que lo han tachado de racista y xenófogo. Los vecinos desmienten estos calificativos y explican que estos hechos son aislados. Además, han dejado claro que en ningún momento quieren dar publicidad a este suceso porque, como hemos visto, muchos grupos de ultraderecha han llegado al municipio venidos de toda España y los ciudadanos se han querido desmarcar de cualquier vinculación política.
Lo que queda claro es que la situación en algunos pueblos de España no es la que nos imagimanos, ni mucho menos. Los vecinos de Alcorcón intentan quitarle importancia a una mal que poco a poco se ha hecho más grande. Muchos se quejan de la poca presencia policial y de la pasividad de los agentes. Debido a la situación, los jóvenes de la localidad han decidido defender lo que es suyo reuniéndose y contratacando de una manera inesperada, cogiendo desprevenidos a las fuerzas del orden público y creando en la sociedad una sensación de inseguridad y malestar que nunca antes habían experimentado los ciudadanos.
Ahora la actuación policial se ha incrementado de una forma espectacular y Alcorcón como declaran muchos vecinos, en este momento es una ciudad protegida porque, como aseguran el problema de la localidad es la delincuencia. Aún así, la presencia policial ha derivado en un envalentonamiento de algunos jóvenes radicales que se han tomado la justicia por su mano destrozando el mobiliario urbano que se encontraban por delante.
Lo peor de todo, seguramente, es que la situación creada estos días se olvide y no se haga nada por intentar remediar estos problemas entre los grupos de Alcorcón provocando dentro de unos meses nuevos enfrentamientos. Los políticos deberían arrimar el hombro y por una vez dejar de "echarse la mierda unos a otros "porque esta situación requiere que todo el mundo ponga de su parte y colabore para que el problema se solucione lo más pronto posible.
Todo el mundo se puede manifestar de una manera pacífica y respetando a los demás, porque cuando existen malas intenciones por parte de algunas personas o grupos esto genera más odio y violencia. Hay que recordar que la violencia genera violencia.
BY DANi.
Opinión Libre: ¿La situación en Alcorcón se podría repetir en otras ciudades de España?

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo estoy viviendo de cerca estos aontecimientos, porque estudio en Móstoles y mucha gente de mi clase vive por Alcorcón y alrededores. Decir que le doy la razón a los ciudadanos de Alcorcón y sobre todo a un hombre que salió el sábado en el buscador diciendo que habían sido los medios de información los que habían enaltecido esto. La gente de alcorcón esta cansada de que los niños tengan que pagar para poder jugar en los parques (cosa que suelen hacer bastante por determinadas zonas de este municipio), porque no aceptan normas establecidas, arman jaleo por donde pasan y bueno... por bastanes cosas más.
Todo esto empezó por una tontería por lo que tengo entendido. Que un borracho se empezó a meter con un español, el otro le pegó... y ya está el pollo montado. Como se suele decir, fue la gota que colmó el vaso.
De ahí ha aldo todo esto. La ent de alcorcón se quería manifestar PACIFICAMENTE, pero los medos llevaron esto a otro grado, empezó a hacerse eco, empezaron a llegar pandillas de otra partes del país, busando camorra... y ahí es cuando ha empezando toda la delincuencia urbanistica y donde se ha manifestado la delincencia juvenil de algunas tribs ubans (véase skinheads, neo-nazis, grupos de ultraderechas, etc)
La gente de alcorcón no es racista. Intentan vivir pacificamente sin tener que pagar para usar instalaciones públicas. que los políticos no digan que no hay quejas de esto por escrito, porque sí las hay. Ahora, lo que hayan hecho con ellas... ya es cosa del ayuntamiento.
No le echo la culpa a nadie, esto tenía que explotar un día u otro... Solamente decir que esos grupos que van buscando pelea, que busquen algo más provechoso que hacer para perder el tiempo que pelearse por cuestiones que ni siquiera atañen a su propio barrio.

Juan Rodríguez Millán dijo...

Lo de Alcorcón pasa en miles de sitios de España y del mundo sin que nadie se quiera dar cuenta. Sólo miramos hacia allí cuando apetece, como es el caso de Alcorcón. Al fin y al cabo, hay que llenar páginas de periódicos y minutos de televisión. En un par de semanas nadie se acordará de esto.
Por cierto, en mi barrio, en Madrid capital, grupos de sudamericanos cobran por utilizar las canchas públicas y una carnicería marroquí es un centro de venta de droga. Todo el mundo lo sabe, pero las autoridades no hacen nada. Si algún día se produce algún episodio violento por mi barrio, en Madrid capital, os lo haré saber...