domingo, 11 de febrero de 2007

OBREROS QUE MUEREN

La construcción en España se encuentra en auge. Los empresarios ganan dinero de una forma muy rápida pero sin preocuparse de sus empleados que son los que les hacen cobrar todos los meses esas rentas astronómicas.
Las obras que se desarrollan en la Comunidad de Madrid han dejado demasiadas muertes por el camino. Los sindicatos no se posicionan de una forma clara cayendo en la pasividad y en un diálogo ambigüo. Son muchos los trabajadores de la construcción que se dejan la vida en una profesión que no cumple en la mayoría de las veces con la ley.
El 23 de enero pasado moría un obrero de nacionalidad marroquí en las obras de la ampliación de la línea 7 de Metro, en Coslada. El obrero se encontraba trabajando cuando un volquete (carro que se usa en la construcción para el transporte de escombros) le golpeó violentamente fracturándole ambas piernas. Le trasladaron al hospital de la Princesa, pero horas después fallecía de una parada cardiorrespiratoria a consecuencia de otro impacto que había recibido en el tórax.

Parece mentira, pero cada semana que pasa los madrileños nos acostumbramos a estos "accidentes" (denominados por las empresas, constructoras y contratas) que no son, sino una mala gestión y coordinación de las medidas de seguridad que en muchos casos las empresas pasan por alto.
Como siempre las subconstratas ( que en los últimos años se han puesto de moda) echan balones fuera y aseguran que el obrero estaba capacitado para desempeñar las funciones que se le exigía. Cada parte se quita su responsabilidad lavándose las manos.
La Comunidad de Madrid intenta que cumplan la normativa. Y los sindicatos hacen lo que pueden, más bien, poco o nada. Se limitan cada uno a redactar un informe en el que se detallan los problemas que sufren los trabajadores para al final recitar una serie de recomendaciones que nunca van a cumplir las empresas.
Entonces, me pregunto en qué situación queda el obrero fallecido y sus compañeros. Existe un vacío legal inmenso con grandes lagunas donde nadie quiere tomar cartas en el asunto.
Y las cifras muestran un considerable número de muertes en la construcción, también en el sector sevicios y en la industria. Por ejemplo, un total de 1352 trabajadores en toda España perdieron la vida en 2006.
Ese año los accidentes se conbraron la vida de 168 madrileños, un 8% más que el año anterior. 44 fallecidos (35 españoles y 9 extranjeros) en el trabajo en sentido estricto, 13 a consecuencia de una caída y 11 tras quedar atrapados.
Por sectores: 20 trabajadores en la construcción, 13 en servicios y 11 en industrias.
Además en 2006, la Conserjería de Empleo y Mujer abrió un total de 2.494 expedientes y recaudó 8,8 millones de euros por sanciones.
Más información sobre estos datos en el periódico globalHENARES que se distribuye de forma quincenal por el corredor del Henares.

Son cifras que avalan el deterioro progresivo en un tema tan importante como es el de la seguridad en la construcción. Los trabajadores se merecen un mínimo de responsabilidad de la empresa que les contrata. Ellos cumplen pero sus superiores no. Algo hay que hacer para que esta situación cambie, pero las medidas sancionadoras son leves y muy premisivas. Además, la aceleración de los trabajos en la red de Metro para que las obras del suburbano se terminen cuando la Presidenta de la Comundad estableció hacen que los accidentes se multipliquen. Cobrar y terminar es lo único que importa y los trabajadores como siempre en el punto de mira siendo los más perjudicados.
Las administraciones deben trabajar juntas para minimizar los posibles accidentes laborales. Según los estudios realizados, si las empresas gastaran el 2% de todos los beneficios que ganan en formar a sus empleados en materia de seguridad se reducirían entre un 30 y un 40% los accidentes en el trabajo. Todos deben poner de su parte para solucionar esta lacra que se sigue extendiendo por toda España y que amenaza con instaurarse de forma permanente en el sector de la construcción.
BY DANi.

Opinión Libre: ¿La Comunidad de Madrid debe establecer unas leyes más duras al sector de la construcción?

1 comentario:

Juan Rodríguez Millán dijo...

Por algún extraño motivo, los muertos en "accidentes laborales" son los grandes olvidados en este país. Es una sangría que hay que detener, y yo abogó por medidas mucho más estrictas, con sanciones mucho más duras si efectivamente se comprueba que no se han cumplido las normas de seguridad.