sábado, 30 de diciembre de 2006

¿QUIÉN DA LA VEZ???


LA CRÓNICA:
Es una frase que se usa mucho durante las mañanas en todos los mercados de nuestro país. Y más en estas fiestas navideñas. Hoy me he dirigido a una pescadería que no se encuentra lejos de mi casa. En el establecimiento se encuentra también la frutería, la charcutería , la carnicería ... es una especie de galería, eso sí muy pequeña. Al entrar una bocanada de aire caliente se impacta en la cara, entre la calefacción y el calor humano al principio resulta un poco asfixiante. Poco a poco, el local se va llenando de gente y empiezan los problemas cotidianos. Eran las 12:00 de la mañana y en un 30 de diciembre es casi imposible moverse por los mercados sin darte codazos con el de al lado. Entonces, llego a la pescadería y hago la pregunta estrella: ¿quien da la vez?. Una anciana que se encontraba muy cerca de mí, me contesta: Yo hijo, yo soy la última. Bien, el primer problema solucionado, ahora solo queda esperar a que me atiendan. Los pescaderos, que son dos, hacen lo que pueden para atender a toda sus clientes que les esperan pacientes detrás del mostrador con cara de no haber roto un plato.
Sigue entrando gente, y se vuelve a oír la misma preguntita: ¿quién da la vez?; ¿quién es la última?; y aquí comienza el caos. La misma persona que está siendo atendida en la pescadería, también se encuentra en la cola de la carnicería. Y claro, nadie contesta. La mujer que ha hecho la pregunta se enfada y decide colarse porque como no sabe quien es la última... Por si fuera poco, una mujer y su marido llegan corriendo y le preguntan al pescadero: Manolo: ¿ ya tienes el pedido que te dejé ayer?; y le grita el pescadero: Se me ha olvidado, ahora mismo te lo pongo. Y la demora se alarga hasta el infinito, que si 6 nécoras, que si 1 kilo de langostinos, la merluza; ¿ entera, o solo la parte del principio?... La gente que aguarda su cola se impacienta y cada vez somos más los que nos apelotonamos para ser atendidos. Niños llorando, gente que se va y luego vuelve... Y llega mi hora, porque la que iba delante mío ya ha terminado de pedir lo suyo y un pescadero mira a la muchedumbre y suelta: ¿a quién le toca?. Cuatro voces dicen al unísono: a mí. Me vuelvo y me les quedo mirando con cara de tonto, ¡se querían colar! y delante de mis narices. Menos mal que la anciana que se marchaba les contesta: no, le toca a este mozo, él iba antes que vosotros. Los que habían saltado antes, se callan y miran para otro lado. Mientras pido, oigo voces criticonas a mi alrededor: claro, es que es una vergüenza, todo el mundo se cuela, esto no puede ser, yo iba antes... Finalmente, me llevo mi medio kilo de langostinos y me dirigo hacia la salida pensando que, aunque el mundo evolucione, la pregunta de la discordia en los mercados será siempre la misma: ¿Quién da la vez?

BY DANi.

Opinión Libre: ¿Se os ha colado alguna vez alguien cuando habéis ido a la compra?

1 comentario:

Anónimo dijo...

Wenu, de remodelación con tu blog.. eso está bien :D
Como te dije en su dia, tu vas para columnista y esta entrada en tu blog lo confirma. Ya ves tu, de algo tan simple como "¿Quién da la vez?" has sacado un articulo. A seguir igual, eh?
Yo ahora opino... agregando cosas a la entrada. Como por ejemplo, no se os ha puesto nunca una persona detras tuyo que te pesigue en cada paso que das? si te mueves un paso adelante, esa persona da 1 paso adelante pegandose a tu espalda... o respirándote en la nuca... o gritado al pescadero/frutero/carnicero para que se de más prisa... o esa señora que baja de casa en zapatillas y bata con los rulos puestos (si, no es una invención de cruz y raya, yo las he visto) diciendole a la frutera y colándose por todo el morro: Niñaaaaa, dame un poco de perejiiiil!!
En fin, creo que de esto se podría hacer un buen monólogo... y si no, siempre nos lo podemos quedar como una costumbre tipical-spanish
DEB